Debido a su proximidad con México, California se ha vuelto un destino popular para cruzar la frontera. Un incremento en el número de agentes de patrullaje de frontera y la nueva tecnología, han dificultado cruzar la frontera en ese estado. Como resultado, más inmigrantes ilegales han decidido tomar la ruta más riesgosa por los desiertos de Arizona. Sin embargo, la creciente seguridad de frontera no ha disminuido la esperanza de los inmigrantes ilegales de lograr cruzar la frontera. Hay muchos inmigrantes ilegales que todavía optan por cruzar la frontera a través de California. En Tijuana, México y las ciudades mexicanas vecinas no es difícil encontrar grupos de inmigrantes ilegales cerca de la frontera con ninguna o pocas pertenencias. La mayoría de los inmigrantes ilegales en la frontera EE.UU.-México es de México pero se pueden encontrar centroamericanos y de otros grupos étnicos. Independientemente del origen de los inmigrantes ilegales, todos comparten el mismo sueño de venir a los Estados Unidos y mejorar sus vidas. Se quedan cerca de la frontera esperando pacientemente la oportunidad de cruzar mientras observan detenidamente los movimientos de los Agentes de Patrullaje de la Frontera estadounidense. Probablemente los inmigrantes ilegales no tendrán éxito en su primer intento de cruzar la frontera y podrían requerirse varios. Para incrementar las probabilidades de cruzar exitosamente la frontera, los inmigrantes ilegales utilizan los servicios de un “coyote” o contrabandista humano. Estos servicios pueden costar miles por cada inmigrante ilegal que logre cruzar la frontera.

Se estima que actualmente hay unos 12 millones de inmigrantes ilegales en los Estados Unidos. Se dice que sólo en California hay 3 millones. Aquellos que apoyan a los inmigrantes ilegales argumentan que el estado de California, junto con otros estados, se ha beneficiado con la llegada de los inmigrantes debido a la mano de obra barata y sus contribuciones. La mano de obra barata permite a los negocios competir contra empresas nacionales e internacionales. Los inmigrantes ilegales tienen reputación de ser buenos trabajadores y de aceptar trabajos que los americanos normalmente no. Las compras que hacen los inmigrantes ilegales contribuyen en una serie de servicios adicionales requeridos que usualmente se traducen en la creación de nuevos trabajos. Por otro lado, ciertos grupos anti-inmigración reclaman que los inmigrantes ilegales le quitan trabajos al pueblo americano. Además, reclaman que los inmigrantes ilegales bajan los salarios en general, ya que aumentan la oferta laboral de trabajos no calificados y que generalmente están dispuestos a recibir menos por su trabajo. Los críticos de la inmigración ilegal plantean que los inmigrantes ilegales no pagan impuestos y que son una carga financiera para el estado de California. Algunos municipios como este, ya deben luchar por proveer servicios como salud y educación. Tienen un presupuesto y se ven en la obligación de brindar servicios a inmigrantes ilegales y a sus familias. Otro argumento es que los niños de inmigrantes ilegales consumen recursos de educación y hacen el sistema educativo peor de lo que ya es. Un estudio realizado por la Federación para la Reforma de la Inmigración Americana (Federation for American Immigration Reform) (FAIR, siglas en inglés) encontró que el costo de los inmigrantes ilegales en California es de $10.5 billones anuales. Esta cifra incluye costo de encarcelación, salud y educación de inmigrantes ilegales.

Mientras la situación legal y económica de los países de los inmigrantes ilegales no mejore, estos seguirán cruzando la frontera de EE.UU.-México. Los inmigrantes ilegales pagarán miles de dólares a los coyotes o contrabandistas humanos. Están dispuestos incluso a pagarle a un oficial corrupto de la Protección de Aduanas y Frontera de los EE.UU. (US. Customs and Border Protection) para evitar cruzar la frontera con la guía de un coyote. Otros encontrarán diferentes formas de cruzar la frontera, como esconderse en camiones o en la carga. También están los que ingresan al país legalmente pero intencionalmente se quedan más tiempo y violan los términos de su visa. Si bien un número considerable de inmigrantes ilegales en California son mexicanos, también se incluyen centroamericanos, asiáticos y europeos. La creciente inmigración de extranjeros ha cambiado la demografía de los Estados Unidos y continuará haciéndolo. Aunque unos argumentan que la solución a la inmigración ilegal es deportarlos a todos y mejorar la seguridad fronteriza, la respuesta no es simple. Muchos inmigrantes ilegales han hecho a California y otros estados su hogar. Algunos han creado sus propias familias aquí y han asimilado bien la cultura americana. Parte de su proceso de asimilación ha sido legalizar su condición y aprender inglés lo que les brinda mayor cantidad de oportunidades. Para algunos inmigrantes ilegales, las oportunidades son limitadas pero generalmente son más que las que se ofrecen en sus países. Para muchos de los inmigrantes ilegales su meta es llegar a ser residente o posiblemente ciudadano estadounidense.

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